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Usan biosólidos de aguas residuales para cultivos agrícolas

En el Estado de México, desde hace 10 años, Hugo Siles inició el cultivo de aguacates en Zumpahuacán; ahora los exporta a varios países gracias a que mejoró su producción con el uso de biosólidos, es decir, con lodos que se generan después de los procesos de saneamiento de las aguas residuales.

El periodo de maduración de la planta y la pandemia hicieron que la producción se volviera costosa y poco rentable, por lo que pensó en desistir, pero antes, hizo un último intento: aplicó biosólidos en su huerta.

“Desde hace 4 años, aproximadamente, estamos aplicando los biosólidos, no tienen ningún costo, sólo es el transporte de la planta a acá”, comenta el productor agrícola.

En la Macroplanta Toluca Norte de la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM), los lodos generados en el proceso de saneamiento son tratados y deshidratados para reducir su humedad hasta en 90 por ciento y una vez que se vuelven materia seca, se denominan biosólidos.

“Los biosólidos se compostean, se pudren y se les agrega organismos microbiológicos para eficientar su desarrollo y su descomposición”, explica.

Posteriormente, una muestra de los biosólidos se analiza para verificar que cumplan con los requerimientos establecidos en la normatividad vigente y que efectivamente contengan los nutrientes que deben estar presentes, entre los que se encuentran el fósforo y el nitrógeno, mismos que se reconocen como mejoradores del suelo agrícola y forestal.

“Los resultados que hemos obtenido con el biosólido es principalmente la reducción de los costos de producción en la fertilización, el aumento de tamaño del fruto, el crecimiento del árbol, de las plantas, un muy buen desarrollo”, detalla.

Además, gracias a la aplicación de este material, Hugo ha incrementado la cantidad de plantaciones frutales, actualmente cuenta con cultivos de zarzamora, fresa, durazno y blueberry.

“Nuestro producto, principalmente lo que es el aguacate, ha tenido una demanda muy buena y con el uso de los biosólidos ha aumentado el tamaño de la fruta, que es lo que requiere el mercado, por tal motivo este producto se ha cotizado en el extranjero porque les gusta la calidad, en cuanto al tamaño, el color, la forma y nosotros hemos estado mandando aguacate a varias partes del mundo, como España, Estados Unidos y Canadá”, asegura orgulloso el productor.

La CAEM supervisa que la Macroplanta Toluca Norte mantenga altos estándares de calidad en los subproductos que genera, de acuerdo con la NOM-004-SEMARNAT-2002, que se refiere al aprovechamiento de lodos y biosólidos.