El pulque, el tecuí, la garañona, la chiva, los mosquitos, el mezcal y el sendechó, bedidas tradicionales del Edoméx
Para disfrutar de una experiencia completa al viajar, el Estado de México ofrece sabores únicos e ingredientes endémicos que se distinguen en el paladar, a través de los alimentos y las bebidas.
En las diferentes regiones de la geografía estatal hay varias bebidas tradicionales que poseen identidad, diversidad y trascendencia como el pulque, el tecuí, la garañona, la chiva, los mosquitos, el mezcal y el sendechó.
El pulque es el elixir de los Dioses, una bebida prehispánica que se obtiene de las pencas del maguey. El proceso de fermentación se lleva a cabo en “tinacales”, donde se vierte el aguamiel y se mezcla con la semilla o pie de pulque y, a partir de este momento, se deja reposar por 24 horas.
Al pulque se le atribuyen propiedades medicinales, como que alivia trastornos gastrointestinales, estimula el apetito, combate la debilidad y mejora ciertos padecimientos renales.
Se produce principalmente en los municipios de Jiquipilco, San Martín de las Pirámides, Axapusco, Nopaltepec, Teotihuacán y Tepotzotlán, donde se puede degustar esta bebida.
El tecuí proviene del náhuatl y significa “que mueve o alegra el corazón”. Sus ingredientes son piña, guayaba, manzana, canela, pasas, alcohol de caña, azúcar y jugo de naranja; para su preparación se pica la fruta y se pone a hervir con el alcohol de caña y azúcar, de preferencia en una olla de barro y a la leña.
Este preparado ha pasado de generación en generación entre las familias de Calimaya, por lo general la utilizan en celebraciones familiares y eventos como el Día de Muertos, las tradicionales posadas y el Festival Internacional Cultural del Mariachi.
En el Pueblo Mágico de Metepec se ubica el bar “2 de Abril”, en este sitio, desde hace más de 90 años, se prepara y sirve la garañona, bebida de color verde hecha con más de 14 hierbas, receta que ha sido celosamente resguardada.
A esta bebida se le atribuyen propiedades medicinales, digestivas y afrodisíacas, de ahí su nombre, pues quienes la probaban decían que los volvía “garañones”.
La chiva es un licor tradicional elaborado en el Pueblo Mágico de El Oro, con 21 hierbas, entre las que destacan hierbabuena, manzanilla, menta, toronjil, peshtó, maro, cuasia y prodigiosa, entre otras. Es ingerida como digestivo, aunque algunas personas optan por tomarla para los sustos o corajes.
Los mosquitos es una bebida tradicional de Toluca. Este licor de naranja, elaborado de manera artesanal, lleva la receta de la familia Almazán. Su preparación se basa en la fermentación de alcohol de caña, naranja, miel y otros ingredientes secretos.
Es tradición adquirir los mosquitos en los Portales, en específico en la tienda “La Miniatura”.
Reza el dicho que “para todo mal, mezcal; para todo bien, también”. En el estado predomina el mezcal artesanal, el cual puede variar de sabor de alambique, pues en su producción cada maestra y maestro mezcalero imprimen su sello característico.
Los principales destinos en los que visitantes nacionales y extranjeros pueden consumir y adquirir esta bebida son Malinalco, Ocuilan, Tenancingo, Zacualpan y Zumpahuacán; además de la producción de piñas de agave en Ixtapan de la Sal y Tonatico.
El sendechó es un fermentado de maíz amarillo germinado y secado al sol, se muele y hierve con miel o piloncillo, después se le agrega pulque o miel de agave y se fermenta por varios días.
Esta bebida se conoce como la cerveza precolombina, que elaboraban los mazahuas y otomís, principalmente se degusta en San Felipe del Progreso.