Edomex

La pulverización del voto en Edomex

Por Gali-Leo

Para las elecciones en el Estado de México hay 7 contendientes, cosa inédita:

Josefina Vázquez Mota por el PAN, Juan Zepeda al frente del PRD, Alfredo del Mazo Maza representando al PRI y su chiquillada, Teresa Castell, candidata Independiente, Isidro Pastor Medrano en su calidad de Candidato Independiente, Delfina Gómez con MORENA y Oscar González por el PT.

El ciudadano Mexiquense en edad de votar tiene diversas opciones para elegir a quien considere la mejor opción o la menos peor para gobernar.

Sin embargo, el candidato y partido que llegue a ganar la elección, no será por mayoría; será representante de la “mayor minoría”; por el efecto de una “pulverización” del voto.

Veamos esta reflexión:

Según las cifras oficiales del IEEM, el promedio de votantes en las elecciones de 1999, 2005 y 2011, fue únicamente del 43.6% de la lista nominal.

El ganador lo hizo con un promedio del 50.66% en las tres elecciones referidas.

La lista nominal hasta el 15 de enero, para la elección de 2017, es de 11 millones 258 mil 125 votantes potenciales; de los cuales el 51% son mujeres y el 49% hombres.

Si mejora la tendencia de las tres últimas elecciones para gobernador, en el promedio de votación (43.6%), siendo exageradamente optimistas y a pesar del descrédito de los partidos, candidatos, gobernantes; las crisis familiares ocasionadas por el “gasolinazo”, el incremento constante de la luz, de los alimentos de primera necesidad; la inseguridad, etc., etc., la participación ciudadana puede llegar al 50%, lo que equivale a 5 millones 628 mil 62 votantes.

El candidato ganador de las tres elecciones anteriores, lo hizo con un promedio del 50.65% del total de votantes; subiendo de manera desmesurada en la elección de 2011 (61.97%) porque su promedio anterior fue de sólo el 43%.

Si se diera la misma tendencia; la elección 2017, se ganará con la participación de 2 millones 814 mil votantes: sin embargo, aquí es donde el número exagerado de candidatos pulveriza el voto en favor de quien tiene un mayor número adeptos, conocido coloquialmente como “El Voto Duro”. Veamos:

PAN puede llegar a tener, según su tendencia; hasta 1 millón de votos, sin alcanzar a igualar los obtenidos en 1999 que fue de 1 millón 146 mil 71 votos.

PRD, que va sólo y se encuentra en un proceso de división de dirigentes, representantes y militantes, tiene que dividir sus votos, por lo que puede obtener hasta 900 mil votos a favor.

PRI, con su organización extendida por todos los rincones del Estado y con mayor voto duro, puede obtener 1 millón 250 mil votos, incluyendo lo que aporte su “chiquillada”.

Los dos Candidatos Independientes en conjunto, tiene posibilidades de obtener hasta 1 millón de votos. Siendo dominante pastor Medrano con al menos 700 mil votos a su favor, su poder económico puede ser factor para alcanzar esta cantidad.

MORENA, dividiendo votos con el PRD, adicionando a inconformes y ciudadanos indecisos, puede llegar a 1 millón de votantes a su favor.

PT, solitario y sólo como comparsa puede llegar al medio millón de votantes, cantidad que quizá le sirva para seguir manteniendo el registro local.

Con esta proyección si hubiese una alianza de izquierdas la votación a su favor sería de 2 millones 400 mil votos.

Si se hubiese concretado la alianza PAN, PRD y PT, la votación teórica sería similar al de las izquierdas.

La elección 2017, será recordada en el futuro porque el triunfador, lo hará con el menor porcentaje de votos a su favor en la historia.

Sin embargo, si la elección se sale de las tendencias estadísticas, cualquier partido y candidata o candidato, pueden ganar la gubernatura con la risible y ridícula cantidad de un millón y medio de votos de los 11 millones 258 mil 125 ciudadanos registrados en la lista nominal.

Bueno, esto no deja de ser meras especulaciones; sin embargo, pulverizar el voto es una estrategia para ganar, de quien tiene la mayor cantidad de voto duro.