Edomex

Fátima, cinco años de impunidad

Con información de Sinembargo.mx

Hoy 5 de febrero se cumplen cinco años del feminicidio de Fátima Quintana Gutiérrez, una alegre niña de tan solo 12 años, que fue violada, golpeada y lapidada en la comunidad de Lupita Casas Viejas, en Lerma, Estado de México.

A cinco años de su muerte su familia exige al gobierno del Estado de México justicia, que los responsables paguen por arrebatarle la vida a Fátima; pero en este 2020 uno de los feminicidas, Misael Atayde Reyes, está a punto de salir de prisión, a tan sólo tres años de su sentencia.

“Yo solamente quiero justicia en el caso de mi hija, es lo único que pido: justicia nada más. Justicia para Fátima, justicia para todas”, expresó Lorena Gutiérrez, madre de la pequeña, en rueda de prensa.

El día de su muerte, Fátima regresaba de la escuela, cuando fue interceptada por tres sujetos, quienes eran sus vecinos, con una navaja le hicieron cortes en la cara y el cuello, la llevaron a una zona boscosa, donde la acuchillaron 90 veces, le fracturaron las muñecas, los tobillos, le dislocaron un hombro, le sacaron un ojo y le tiraron sus dientes.

La violaron para finalmente matarla arrojándole tres piedras: una de 36 kilos, y otras de 32 kilos. Después la enterraron.

Su madre Lorena Gutiérrez, al ver que Fátima no llegaba salió a buscarla menor, encontrándose en su camino a Misael Atayde, uno de los feminicidas, quien negó haber visto a la menor. 

Lorena buscó a la amiga de Fátima, con quien siempre regresaba de la escuela y le dijo que cerca de su casa se separaron, y la acompañó continuar con la búsqueda, encontrando de nuevo a Misale, quien una vez más negó haber visto a Fátima, pero su amiga le refutó que él estaba junto con su hermano Luis Ángel Atayde y José “N”, alías “El Pelón” en el barandal afuera de su casa, por lo que debían haberla visto.

La búsqueda continuó por la zona y ese mismo día hallaron el cuerpo de la menor.

Lorena ha narrado que desde entonces empezó su infierno: “yo encontré a mi hija semi enterrada, solo le alcancé a ver un pedacito de su pie. En un primer momento pensé que se lo habían cortado, y no, era su cuerpo, solo que estaba semi enterrado”, explica la madre.

La familia de inmediato sospechó de los tres vecinos que estaban en el barandal cuando ambas niñas, Fátima y su amiga, bajaron del camión. Los parientes de la niña junto con pobladores del lugar acudieron a la casa de uno de ellos, Luis Ángel y ahí encontraron ropa, zapatos, una camiseta y pantalón de mezclilla llenos de sangre, la sangre de esas prendas era de mi hija y de un masculino”, explica Lorena.

Los pobladores golpearon a los tres acusados del crimen, quienes fueron rescatados por policías y llevados al Hospital de Toluca donde estuvieron internados 15 días.

“A Misael Atayde Reyes lo dejaron libre porque era menor de edad, y no había suficientes pruebas para que nos dieran la orden de presentación de un juez en ese momento; ese día José Ángel Atayde Reyes y “El Pelón” fueron ingresados en el penal de Lerma, pero ahí fue donde empezó el proceso y todas las irregularidades de la Fiscalía”, acusa Lorena.

La carpeta de investigación por el asesinato de Fátima estuvo llena de errores cometidos en la Fiscalía del Estado de México, denuncia Lorena Gutiérrez.

Entre la ropa que encontraron en la casa del asesino, Luis Ángel Atayde, había unas prendas propiedad de “El Pelón” manchadas con sangre que no fueron analizadas.

“La FGE nunca pidió sacar las pruebas ni hicieron un esfuerzo por tener un comparativo de ADN. Argumentaron que le violentaban los derechos de ellos, ¿pero nuestra hija no tenía derechos?, ¿no tenía derecho a que se hicieran esas pruebas?”, cuestiona Lorena.

Además, la Fiscalía de Edomex dijo que no contaba con tiras reactivas para hacer las pruebas genéticas a fin de obtener los perfiles genéticos. “Y esto no lo estoy inventado, esto está plasmado en el expediente, en una carpeta plagada de ineficiencia, de violaciones a todos los derechos. Ellos tuvieron a bien plasmar en la carpeta de mi hija todas sus omisiones”.

Luis Ángel Atayde Reyes fue sentenciado a 72 años 8 meses de prisión. Misael, quien inicialmente fue excarcelado, fue detenido nuevamente meses después cuando ya había cumplido la mayoría de edad; pese a saldrá libre en octubre.

En tanto que “El Pelón” fue liberado el pasado 8 de junio de 2017, nuevamente fue detenido, luego que la familia ganó el amparo directo 200/2017 y se ordenó la reposición de juicio.

Al ganar ese amparo, que permitió la reposición, durante el 2019, la familia de Fátima tuvo que confrontar 9 meses más de audiencias y diligencias, logrando una resolución favorable que excluía dicha probanza de la etapa de oralidad del proceso, informó el Observatorio Nacional del Feminicidio en un comunicado emitido la semana pasada.

Frente ello, se presentó un amparo para evitar la revictimización a la familia, el cual, se tenía programada su resolución el pasado 20 de enero, sin embargo, la fecha de la audiencia se pospuso para el próximo 10 de febrero.