Medio Ambiente

Capacitan a prestadores de servicios turísticos para el cuidado y protección de la Biosfera de la Mariposa Monarca

Identidad, origen, gran riqueza cultural, natural, histórica y social poseen los sitios que han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como la Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca, espacio que el Estado de México comparte con Michoacán.

La reserva se considera en dos zonas para su cuidado, la Zona Núcleo, que es el lugar donde la mariposa se refugia, es decir, su hábitat primordial, por lo que las únicas actividades permitidas en ellas son las de investigación.

También la Zona de amortiguamiento, aquella destinada a proteger del impacto externo a la Zona Núcleo y donde se pueden realizar actividades económicamente productivas dentro de las normas ecológicas que permitan la protección de estas áreas naturales.

Entre bosques de oyamel, pino, encino y cedro llega este pequeño insecto a hibernar, entre noviembre y marzo, en los Santuarios que se ubican en los municipios de Temascalcingo, San José del Rincón, San Felipe del Progreso, Donato Guerra y Villa de Allende.

La Secretaría de Cultura y Turismo del Estado, en conjunto con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y la Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (Cepanaf), han fomentado la protección, cuidado y preservación de esta zona, a través de la capacitación y profesionalización entre las y los prestadores de servicios turísticos que residen en los ejidos que conforman los Santuarios.

Asimismo, año con año durante la temporada de avistamiento se comparten a las y los visitantes los lineamientos que deben seguir durante el recorrido, como no molestar, no tocar ni llevarse a las mariposas, respetar los horarios de los Santuarios, no introducir alimentos ni bebidas alcohólicas, no tirar basura, seguir los senderos establecidos, no llevarse flora y fauna, permanecer en silencio, no usar flash para tomar fotografías, no usar sanitizante ni gel antibacterial, así como no llevar mascotas.

A finales de agosto la Mariposa Monarca emigra hacia México, pero su llegada varía, ya que la entrada de la época de frío a México no es puntual, sin embargo, sucede alrededor de la primera quincena de noviembre.

La distancia del recorrido desde su lugar de origen, el sur de Canadá y norte de Estados Unidos, oscila entre los 5 mil a 5 mil 200 kilómetros.

La Reserva de la Biosfera de la Mariposa Monarca también es una importante zona de captación de agua de lluvia y un punto estratégico para la conservación de la biodiversidad del país, por su alto grado de especies endémicas, por ello recibió la declaratoria como Bien Patrimonio Mundial Natural por la UNESCO el 8 de julio de 2008.