Inesperada amistad en la UAEMéx: Zorro gris y cacomixtle forman alianza de supervivencia
La Ciudad Universitaria de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) se ha convertido en el escenario de un descubrimiento fascinante: la inusual alianza entre dos especies típicamente solitarias, el zorro gris (Urocyon cinereoargenteus) y el cacomixtle (Bassariscus astutus).
Este sorprendente comportamiento fue documentado mediante cámaras trampa como parte del proyecto de investigación “Inventario y monitoreo de fauna silvestre en Ciudad Universitaria”, liderado por el profesor Leopoldo Islas Flores, de la Facultad de Planeación Urbana y Regional.
Mutualismo Facultativo en el Campus
El profesor Islas Flores resaltó que las imágenes revelan un comportamiento que sugiere una relación de mutualismo facultativo, un fenómeno poco común en la naturaleza. Esto significa que ambas especies se benefician mutuamente sin depender totalmente la una de la otra para sobrevivir.
Entre las interacciones captadas se encuentran:
Exploración conjunta de áreas.
Búsqueda de alimento compartido (frutas, roedores y restos orgánicos).
Momentos de “jugueteo” sin señales de agresión.
“Los hallazgos sugieren que el zorro gris y el cacomixtle podrían estar aprovechando recursos comunes de manera compartida, lo que les permitiría acceder a una dieta más variada sin tener que competir entre ellos”, explicó el investigador.
Complemento de Sentidos y Seguridad
Además de la búsqueda de alimento, el estudio sugiere que la presencia conjunta es una ventaja para la detección de amenazas. El zorro y el cacomixtle podrían estar utilizando sus sentidos complementarios para maximizar la seguridad y protegerse de riesgos del entorno urbano, como perros y gatos ferales o la presencia humana.
El experto universitario enfatizó que esta alianza ofrece una nueva perspectiva sobre cómo la fauna silvestre se adapta y colabora en ambientes urbanos, donde los recursos y las amenazas varían constantemente.
Sin embargo, Islas Flores advirtió que la relación podría ser transitoria, pues depende de la disponibilidad de recursos y los cambios estacionales en el campus.
El monitoreo continuará para comprender mejor las dinámicas de convivencia y seguir contribuyendo a la conservación de la biodiversidad local.